Foto: Nuria Soler | El Periódico |
El Caja3 será el quinto equipo de la Copa del Rey tras ganar el
primer derbi aragonés en ASOBAL, que no sin esfuerzo, consiguió imponerse a los oscenses del
Obearagon Huesca que supieron ponerle las cosas difíciles al conjunto naranja.
El Caja3 cambió de pabellón pero no de dinámica. Los de
Mariano Ortega continuaron una vez más imponiendo una defensa que fue muy
difícil de franquear por los visitantes.
La velocidad la quería poner el Caja3 tras las defensas, efectuando los ataques y las defensas con los mismos hombres. Aun así, pese a salir fuertes en ataque y sólidos en defensa, no conseguían su objetivo de romper el marcador. Tan solo diferencias mínimas de dos y tres goles, que conseguían salvar los oscenses, amagaban el despliegue en el marcador sin éxito.
La velocidad la quería poner el Caja3 tras las defensas, efectuando los ataques y las defensas con los mismos hombres. Aun así, pese a salir fuertes en ataque y sólidos en defensa, no conseguían su objetivo de romper el marcador. Tan solo diferencias mínimas de dos y tres goles, que conseguían salvar los oscenses, amagaban el despliegue en el marcador sin éxito.
A falta de cinco minutos para finalizar la primera parte, el
Caja3 conseguía poner el 14-10 y poner la máxima renta del encuentro, que pese
al intercambio de goles de ambos conjuntos, no cambiaría las diferencias al
descanso (17-13).
En la segunda mitad la dureza en la defensa maña descendió,
haciendo así que los visitantes recortasen distancias y se pusieran a tan solo
dos goles de los locales (18-16, min 4). Sería ahí cuando los pupilos del de
Esparraguera, comenzaran a darle forma al partido y parecía que comenzaban a
coger buena inercia llegando hasta los seis de diferencia en el minuto 11
cuando se ponía el 23-18.
Los locales pensaban que la victoria ya era un hecho, pero la gran cantidad de aficionados oscenses que se desplazaron a Zaragoza no estaban por la labor de viajar para ver caer derrotado a su equipo en el primer derbi, por eso comenzó la remontada desde las gradas. El Balonmano Huesca no quería ceder la victoria así como así a los naranjas, fue entonces cuando tirando de orgullo se acercaba peligrosamente al conjunto local.
Los locales pensaban que la victoria ya era un hecho, pero la gran cantidad de aficionados oscenses que se desplazaron a Zaragoza no estaban por la labor de viajar para ver caer derrotado a su equipo en el primer derbi, por eso comenzó la remontada desde las gradas. El Balonmano Huesca no quería ceder la victoria así como así a los naranjas, fue entonces cuando tirando de orgullo se acercaba peligrosamente al conjunto local.
Mariano Ortega veía que su equipo estaba poniendo en peligro
una ventaja que permitía obtener con comodidad dos puntos que valían oro en las
circunstancias clasificatorias en la que se encontraban, y por eso veía el
momento oportuno para parar el encuentro y reorganizar a su equipo (27-23, min
28).
Poco más quedaba por acontecer, un pequeño acelerón a falta
de cinco minutos del Huesca en busca de la sorpresa, era insuficiente para
sobre pasar a un equipo tan sólido como es el Caja3 que tirando de sus piezas
claves en los últimos instantes consiguieron victoria por partida doble.
En pista, abrazos y gestos de cariño entre todos los
jugadores a la conclusión del encuentro y gran ovación del público para unos y
otros que vivieron sin duda un partido histórico.
Cronica de David López para muchobalonmano.es