El primer objetivo ha sido cumplido, 10 goles de diferencia dejan la eliminatoria encarrilada para el partido de vuelta en Banja Luka.
El equipo Serbo-Bosnio es duro y correoso, tiene kilos y oficio además cuenta con un portero sobrio y seguro, no obstante el próximo fin de semana partirá con un menos diez en su casillero, desventaja que aventuramos a entender como muy difícil de recuperar.
La receta para evitar la remontada en los Balcanes es muy simple aguantar los golpes y dar un paso adelante, el único problema que podemos tener es volver con algún que otro jugador tocado o lesionado, pero la diferencia es muy amplia como para que la eliminatoria corra peligro, sea dicho todo lo anterior con el debido respeto y siempre teniendo en cuanta que en el deporte nunca estas a salvo de la una posible debacle.
Arrancar con fuerza, imponer nuestra superior calidad y controlar el partido, así de sencillo y de complicado a la vez, desterrar los fantasmas de sitios como Bregenz y mantener el nivel, de este modo estaremos en el próximo bombo y en la siguiente ronda.
Fdo.-Donbeno ( Alfonso las trompetas espectaculares, hombres curtidos en la guerra se vieron atenazados por el espantoso ruido de nuestras maléficas vuvuzelas)